Después de explorar los dos festivales de referencia del mundo de la publicidad, El Cencerro Rural Ad Festival y Cannes Lions, ya estoy preparado para sacar mis propias conclusiones. Así que aquí va este post especial, ¡calentito desde Cannes!

30 razones por las que el Festival de Cannes nunca podrá ser mejor que El Cencerro.

Porque aquí hay playa, sí, pero está llena de horteras y silicona. En Losana hay una fuente que hace las veces de refrescarte y va que ni pintada.

Porque aquí si te bebes la misma cantidad de alcohol tienes que hipotecar la casa de tus padres para poder pagar.

Porque aquí las copas son una mierda. Mucho Martínez y mucho nosequé pero las copas eran cortas, en vaso de tubo de plástico y por 21 pavazos cada una.

Porque encima los camareros tienen mala hostia.

Porque desde Cannes nadie te va a llamar 4 veces por la noche para decirte que te echan de menos.

Porque ningún camarero de aquí se va a poner al teléfono para decirte “cabrón qué coño haces que no estás en Losana ahora mismo”.

Porque tampoco se va a poner al teléfono ningún alto de la guitarra para decirte que va a intentar hacer que tu colega no se líe con una, solo por joder.

Porque los leones no suenan y los cencerros sí.

Porque las fiestas que se organizan están muy bien y tienen tías en las piscinas pero después apestan a cloro.

Porque desde Cannes no te van a llamar OTRA VEZ, mientras escribes este post.

Porque aquí he visto mucho Lamborghini y mucho Ferrari, pero ni un toro ni un caballo de verdad.

Porque aquí las inscripciones llevan foto y código de barras, en vez de poner un número de ganado, que es como tiene que ser de toda la vida.

Porque aquí hay unas furgonetas donde puedes leer “We Transfer” y te llevan a los sitios, pero tienes que ir sentado y no puedes arrimar cebolleta como con los baches en el camión lanzadera.

Porque aquí te puedes encontrar con Briatore, con el asco que debe dar eso.

Porque aquí la gente habla de premios.

Porque tiene más glamour que una calle se llame Camino de la Fuente Verde porque resulta que es un camino y porque resulta que hay una fuente verde. Yo aquí no he visto en toda la calle ningún Croisette, de hecho, según el diccionario de Google, Croisette NO SIGNIFICA NADA.

Porque aquí hay estrellas Michelin y productoras que te invitan, pero ni una paella decente.

Porque aquí no está El Torcío para decirte “toda una vida criando una polla, y una mañana te levantas y aparece tiesa”.

Porque tampoco está Pedro para explicarte cómo se aparean las vacas, que tiene su cosa, ni el alcalde para explicarte cómo se hace una cesta, que también tiene su cosa.

Porque aquí te multan.

Porque aquí puedes conocer a muchos directores creativos, pero en El Cencerro está Juan Silva y ya con ese te basta y te sobra.

Porque el agua está malísima. O eso me han comentado los que la han probado.

Porque aquí hay fiestas en la playa pero te llenas de arena. Mucho mejor ir a la Disco móvil y llenarte de vino.

Porque aquí para ligar tienes que… bueno, no tengo ni idea de qué hay que hacer para ligar porque ha sido un desastre.

Porque aquí tampoco tienes internet, pero aquí te jode y en Losana no, porque a los pueblos se viene a desconectar, copón.

Porque no tienes que coger un metro, un avión y un autobús para llegar.

Porque Cannes no lo organiza Begoña. Que es un AMOR que se desvive por que todo salga perfecto.

Porque aquí si huele a caca, sabes que no es de vaca.

Porque el Festival de Cannes nunca publicará esto en su página web.

Porque hay 200 razones más, pero tendría que cambiarle el título a este post y estoy perdiendo el Wifi.